
PP lo rechaza y abstrae a PSDEG, pero ambos defienden que habrá «controles» para evitar las desigualdades para los productos gallegos
BNG solo permaneció en este martes en el parlamento gallego, en la votación de una moción para rechazar el acuerdo concluido en diciembre entre Mercosur y la Unión Europea, lo que traerá «serias repercusiones» al Sector Galician Agroganadero con la reducción de los aranceles.
La mayor parte del PP mintió este texto con su voto en contra, mientras que PSDEG y el representante de la democracia de Ourensana, Armando Ojea, optaron por la abstención.
La persona responsable de la defensa del texto fue el Diputado de BNG de Fernández en el segundo lugar, quien advirtió sobre los «resultados catastróficos» que tendrá este «acuerdo desastroso para toda la población europea», especialmente para el sector de la agroindustria.
En este contexto, los nacionalistas pidieron al Parlamento gallego que fuera instantáneamente Xunta que se oponga a este Acuerdo y que envíe su posición a la Unión Española y Europea.
De PSDEG, Lara Méndez no fue particularmente crítica para el acuerdo con Mercosur, pero destacó las «oportunidades» del «mercado común» que se abrirá para «más de 700 millones de personas».
Méndez negó que habrá «cualquier tipo de control» en los productos importados en Europa y explicó que la reducción de las tarifas estará «en un cierto volumen y una parte» que implica «menos del 1 por ciento» del volumen de volumen de Volumen de consumo en la UE. Por lo tanto, el socialista considera que tendrá una «influencia limitada».
En términos similares, el popular Miguel Ángel Viso lideró, quien acogió con beneplácito que el acuerdo con Mercosur permite «liberalización del mercado y favoreciendo el comercio multisectivo». Aunque el diputado de PP reconoció que los agricultores y criadores gallegos podrían tener «preocupaciones legítimas», afirmó que Xunta no permitirá «competencia en la desigualdad de las condiciones».
Viso prometió que el Ministerio de Asuntos Rurales aboga por aprobar las cláusulas de espejo, lo que garantizaría la reciprocidad de la salud y el consumo de productos y que pondrá «medidas de control estrictas», especialmente las importaciones de salud y vegetales animales.
En cualquier caso, el popular recordó que algunas cláusulas protectores se negociaron de acuerdo que les permiten limitarlo si causan «daños graves» en el mercado europeo.
Movimiento en el sector lácteo
El martes también fue rechazada del grupo socialista que solicitó una «interlocución periódica» del gobierno regional con el sector lácteo, así como la implementación de los «todos» instrumentos de inspectores para evitar que los productores pierdan pérdidas.
En este sentido, Lara Méndez propuso que se creara un «mediador» dependiente de la administración que monitorea los acuerdos entre agricultores e industrias.
Aunque en esta ocasión toda la oposición (BNG, PSDEG y DO) votó a favor, PP localizó la iniciativa.