
El Ayuntamiento ya está finalizando los trámites para llevar a cabo la nueva fase de rehabilitación de la fachada de la Escuela Municipal de Música, una actuación que continúa los trabajos realizados el año pasado en la parte del edificio que da a la calle de la Torre.
En este momento, la previsión del Gobierno municipal es intervenir en el sector de la fachada colindante al patio del CEIP Curros Enríquez, donde se llevarán a cabo mejoras en materia de conservación y mantenimiento, una intervención necesaria dada la configuración de la propia fachada, con elementos en relieve. Esto implica un mayor desgaste que lo que supondría, por ejemplo, una fachada lisa.
Aprovechando la llegada de la temporada estival y el cierre temporal de los centros educativos, el Ayuntamiento avanza con el objetivo de concretar estas intervenciones de renovación de la fachada de cara al próximo curso escolar, considerando que los niños del Curros Enríquez juegan precisamente en el patio colindante a la Escuela.
En líneas generales, las actuaciones previstas abarcan mejoras en las partes de la fachada más erosionadas por el deterioro y el paso del tiempo, así como el posterior pintado de la superficie en esta parte de la Escuela, un edificio protegido que cuenta con más de un cuarto de siglo de vida.
Desde su apertura en el año 1998, por la Escuela Municipal de Música han pasado más de 10.000 alumnas y alumnos, a partir de los 4 años en adelante. Con el paso del tiempo, la EMM se ha convertido en mucho más que uno de los principales centros educativos musicales de la ciudad, involucrando a su alumnado en iniciativas de carácter social como actuaciones en residencias de mayores, centros cívicos municipales y también con pacientes oncológicos.
El Gobierno de Inés Rey ha reforzado su respaldo a la Escuela Municipal aumentando los fondos para ese servicio en los últimos presupuestos.