RedaccionLa Xunta de Galicia destinará el próximo año un total de 25,4 millones de euros para llevar a cabo una serie de actuaciones hidráulicas que tendrán un impacto positivo en la calidad del agua en la ría de Arousa y beneficiarán a las poblaciones de los municipios ubicados en ambas orillas.
La conselleira de Medio Ambiente y Cambio Climático, Ángeles Vázquez, anunció esta inversión durante una visita a la Autoridad Portuaria de Vilagarcía de Arousa. Estos fondos se destinarán a proyectos e inversiones de Augas de Galicia en las comarcas del Salnés y Barbanza, incluidos en el presupuesto de su departamento para 2026.
Se destacó que esta región recibirá una importante inversión, representando 1 de cada 6 euros del presupuesto total asignado a la administración hidráulica para el próximo año. Las cuentas de Augas de Galicia ascienden a 151,7 millones de euros, un aumento del 5,5% con respecto al año anterior, demostrando el compromiso del Gobierno gallego con la mejora del abastecimiento y saneamiento tanto en áreas rurales como en grandes aglomeraciones urbanas.
Entre los proyectos a destacar se encuentra la mejora del saneamiento de Vilanova-Cambados, con una asignación de 2 millones de euros para 2026. Además, se llevarán a cabo obras para optimizar el funcionamiento del servicio de depuración de Vilagarcía, con una inversión de 1,1 millones de euros destinados a mejorar los sistemas de colectores municipales y la construcción de una nueva estación depuradora.
Estos esfuerzos se suman a una inversión acumulada de 150 millones de euros en la ría de Arousa desde 2009, con 140 millones aportados por la Xunta de Galicia. Se prevé movilizar otros 92 millones de euros hasta 2029 para seguir mejorando el abastecimiento, saneamiento y depuración de la ría.
En cuanto al presupuesto general de la Xunta para 2026, se supera por primera vez la barrera de los 14.000 millones de euros, con un enfoque en áreas sociales, vivienda pública, economía productiva y preparación para el Xacobeo 2027.
Estas inversiones y proyectos reflejan el compromiso continuo del Gobierno gallego con el desarrollo sostenible, la calidad del agua y el bienestar de la población en la región.
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