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En Moaña (Pontevedra), el 18 de septiembre de 2025, la autorización de la Consellería do Mar a Octolarvae para la instalación de un criadero experimental de pulpo común está dando lugar a un proyecto pionero en España en el lugar de la Borna. Este proyecto está relacionado con el comportamiento de los cefalópodos en su fase larvaria para lograr juveniles con los que regenerar los ecosistemas de las rías. Marta Villaverde, responsable de este departamento de la Xunta, visitó la planta de esta entidad donde se lleva a cabo esta iniciativa, junto con otras actividades de investigación y desarrollo relacionadas con la acuicultura y la biología de diferentes especies gallegas.
La filial de Profand, en colaboración con el Consello Superior de Investigacións Científicas (CSIC) -una de las entidades científicas más prestigiosas a nivel nacional-, trabajarán de forma conjunta durante los próximos cinco años para superar los desafíos biológicos y tecnológicos con la fase larvaria, una acción considerada como uno de los mayores retos científicos en el ámbito de la acuicultura marina.
Las instalaciones cuentan con una planta de unos 350 metros cuadrados, equipada con tecnologías y recursos de última generación para el cultivo de cefalópodos. Se incluyen distintas áreas de cultivo de microalgas, Artemia y fitoplancton, esenciales como alimento de larvas, así como tanques específicos para reproductores y el desarrollo larvario.
La conselleira, al conocer la evolución de esta iniciativa, destacó la visión de la entidad promotora, resaltando que supone una apuesta por una producción más sostenible y por la repoblación de la costa. Con su desarrollo, Galicia se posiciona como un referente en innovación acuícola, siendo este proyecto un ejemplo de diversificación hacia modelos que combinan rentabilidad económica con la preservación de los ecosistemas marinos. En este sentido, se mostró convencida de que esta propuesta tendrá un impacto muy significativo en la sostenibilidad del sector pesquero.
En cuanto a otras colaboraciones, la Consellería do Mar, a través del Fondo Europeo Marítimo de Pesca y de Acuicultura (Fempa), también financió la siembra de más de 1.000 juveniles de centolla realizada en el mes de julio por Octolarvae en la reserva marina de Os Miñarzos. Esta acción está destinada al mantenimiento de esta especie como uno de los mariscos más preciados de Galicia, tanto por su sabor como por su valor en lonja.
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